Memorias de un Inmigrante

Son exactamente las 3:30 de la mañana. El ruido ensordecedor de un despertador echa por tierra la tranquilidad de la madrugada. Entre colchonetas y cobijas desvensijadas se despiertan soñolientas una veintena de amigos y familiares los cuales se aferran como naufrago a la orilla al ultimo segundo junto al joven que se marcha. El aroma que se percibe esta mañana no es precisamente de cafe. Es de lagrima y nostalgia, de incertidumbre y desagravio ante la horrible pesadilla que Cuba pierde uno mas de sus hijos y ellos otro familiar. Todos llevan caras largas y a la vez todos intentan disimular lo mejor que pueden su triztesa y frustracion. Toda una eternidad no es tiempo suficiente para pasar junto aquellos que amamos y cargamos en nuestro corazon asi que, como pueden un par de miseras decadas jamas haberlo sido? Mi abuela me mira con ojos de cristal al saber que su nieto preferido se marcha al 'paraiso' huyendo de una absurda ideologia diseñada y amaestrada a destruir a todo aquel que se atreva a desafiarla. Nada puedo hacer. Se es libre o no se es. Poco importan para mi la seda o la mezqulilla pero vivir entre barrotes y mordazas invisibles que me impiden ser libre de pensar, hablar y actuar es mas de lo que me atrevo a soportar. Demasiado cobarde para merecerme el prestigio de ser vecino de Biscet la unica opcion es emigrar y por ella opte.

Pocas palabras se intercambian durante el desayuno y hasta yo, que siempre tengo algo que decir, me trago las palabras excepto para un macabro comentario que recuerdo con alto grado de indignacion. 'Desayunando en Cuba. Almorzando en Miami'. Esa es nuestra dura realidad. Tan cerca de nuestra querida isla y a la vez es casi mas facil viajar a Marte que a nuestra tierra.

Todos mis recuerdos. Mis años de estudiante. Familiares, amigos, la chica que por aquel entonces me hacia ver el cielo mas azul y un sin numero de varientes las cuales no vale la pena mencionar por que toda la fabrica del universo simplemente no seria suficiente para explicar o justificar tanta memoria no adquirida, tanta navidad no pasada junto a los mios y tanto y tanto sufrimiento, ansiedad y lejania por casi dos decadas mas. Todo por culpa del esclavo mas despreciable que ha caminado sobre la faz de la tierra, Fidel Castro Ruz. No en vano este convive de por siempre en el rincon mas lugubre y obscuro de mi corazon. Quiza el no sepa el grillete que tiene ceñido a su sintura pero reitero el comentario que no hay peor esclavitud que la de ser jefe de esclavos.

El 'claxon' de un '56 avisa que ha llegado mi chofer para llevarme al aeropuerto. Toda mi rudeza se desvanece. Algunos no pueden ir ni al aeropuerto porque simplemente no hay en que y toda mi fuerza se transforma en lagrimas que humedecen mis mejillas. Es dificil admitir que hemos llorado pero hay veces que el dolor es mas fuerte que el orgullo y aun siendo un Espartano en mi interior aun llevo un corazon que sufre y late por los mios. Las cosas se ven hoy de diferente color e incluso el cielo parece color de plomo. Intento como puedo tomar fotos en mi cabeza para guardarlas en algun lugar de mi cerebro para sacarlas en esos momentos de nostalgia cuando las memorias de Cuba regresan a molestarme y recordarme una vez mas que pude escapar de la tirania pero no de los recuerdos adquiridos durante mi estadia en la carcel mas grande y espantosa del Caribe.

Los abrazos y besos de despedia no son suficientes y la pesadilla se repite a mi alredor mientras la realidad de que no soy el unico que se marcha me cala hasta los huesos. Nadie sabe lo que es dolor hasta que no experimenta por si mismo como entre un oceano inimaginablemente inmenso su tierra se pierde en el horizonte. Siempre sucede lo mismo en estos dias. Quiza porque el calor y la presencia de mi familia se extraña tanto como nu puedo siquiera imaginar.

Me mantengo optimista porque creo que muy pronto estare junto a ellos para siempre compartiendo dolores y sonrisas, memorias e inquietudes como las que hace tiempo no podemos tener. Solo entonces sentire que cuelgo luces luminarias y no mi desgarrado corazon a las ramas de mi arbolito. Solo entonces la navidad sabra a felicidad y no a nostalgia acumulada por tantos y tantos años.

Han pasado muchas lunas desde el dia que selle con besos mi dolorosa despedida. Hoy como aquel dia revivo mi experiencia y triztemente una vez mas una lagrima se nota en mi mejilla.

PS: Les deseo a todos un feliz fin de año y que el proximo podamos brindar con el champagne que nunca hemos tomado: Libertad.

Si, Compa

Recuerdo especialmente a mi papa el cual pasaba mas tiempo calentando camas ajenas y tratando de sumerjirse en lo mas profundo de cualquier botella que con nosotros pero mi partida para el fue algo que le arranco de tajo el corazon del pecho.

Tube que de verdad hacer cumulo de todo mi valor despues de haber cruzado al otro lado de la sala de espera para voltear una vez mas y ver a mi padre hacer este gesto con su diestra que llevaba escrito lo sigiente con letras mayusculas. 'ME MATASTES'.

Creo que voy a recordar ese dia hasta que se apague el ultimo vestigio de luz en el universo.

Nat gracias por este bello, aunque doloroso relato!!!
Me hiciste sentir una pequiñisim parte de lo que ustedes sienten al partir del lado de sus familiares!!!

Nat:
¿Me permites un abrazo?.
Salud hermano, lo mereces. Esta noche estás entre mis plegarias a San Lázaro.

Patrio escribió:Nat:
¿Me permites un abrazo?.
Salud hermano, lo mereces. Esta noche estás entre mis plegarias a San Lázaro.

Hermano,

No faltaba mas. Venga!