CUBA DESPUES DE IKE

Amigos,

Solo se que se puede patear, golpear y abusar de un gato mientras este tenga a donde correr. Acorralalo contra la pared y este en defensa propia te sacara los ojos.

Dicho esto, si ahora no nos revelamos y nos salimos de esta jamas lo haremos. No podemos estar peor de lo que estamos y la opcion mas ilogica y descabellada en este mometo es otro exodo masivo.

Retomemos lo que es nuestro! A las malas porque a las buenas esta mas que demostrado que no se nos va a dar nada. Si la naturaleza, Dios o cualquiera que sea la fuerza que nos envio esta 'oportunidad' abrio la puerta lo mas logico es que entremos.

a pesar de que en cuba han pasado dos grandes huracanes que no solo destrozaron la isla sino que dejaron a miles de personas sin sus pertenencias y sin la poca esperanzas que tenia de salir adelante....el pueblo aun confian en ellos, es decir aun estan ciegos.....ustedes mas que yo saben que el gobierno va les dicen dos palabras y solucionan todo, dentro de unos meses estaran el mismo lugar donde habian quedado o peor todavia.....solo esperemos que algun dia llegue el final de todo lo malo que sucede en cuba x culpa del gobierno

yo vote por la tercera opcion,....

y estoy de acuerdo con lo que escribe Vanevelez....

saludos

yo no entiendo mucho pero estoy de acuerdo con lo que dice mi hermana vanesa ya que ella a vivido en carne propia todo lo del huracan y vio como muchos quedaron sin nada.

Ahora mismo (15/09/2008)

Después del Ike
El desabastecimiento avanza. Los damnificados por los derrumbes pernoctan frente a los escombros de sus casas. Miles de reses y aves deberán ser sacrificadas.



15 de septiembre

-Los damnificados por los derrumbes en La Habana pernoctan frente a los escombros de sus casas. Se dice que serán "reubicados" en oficinas u otras instalaciones estatales en desuso, como lecherías o bodegas, o incluso en algunas en funcionamiento, a las que les "amputarían" un trozo para albergar gente. El desabastecimiento de las tiendas avanza a gran velocidad, al tiempo que cunde un rumor: se están transportando productos desde México que el gobierno cubano opta por almacenar.

-Según reporta la BBC a través de su corresponsal en Cuba, al hospital de Gibara no le queda ni un cristal sano y las puertas están amarradas con cables. EL grupo electrógeno no funciona y reciben la corriente de una fábrica vecina. El servicio médico, sin embargo, ha sido restablecido.

-Poblaciones como Banes o Macabi han sido especialmente dañadas, y en Caletones apenas queda alguna que otra casa en pie.

-Volviendo a la BBC, dice que se han visto afectadas unas 700.000 toneladas de alimentos. Hay muchas vaquerías arrasadas en Camagüey y también numerosas granjas avícolas, por lo que muchas vacas y terneros, así como gallinas ponedoras, serán sacrificados. Se han perdido 330.000 hectáreas de cañaverales; también cientos de instalaciones, tramos de vías férreas y almacenes. En Villa Clara sólo hay luz en la capital de la provincia y en algunas cabeceras municipales. El resto se halla sumido en una total oscuridad. La gente deambula por la carretera central, y en Las Tunas los únicos puntos de luz son las gasolineras.

14 de septiembre

-En la ciudad de La Habana empieza a notarse la subida de precios y la falta de ciertos productos. En los agros, la libra de malanga ya cuesta 6 pesos (ayer estaba a 5, antes a 4). Los boteros comienzan a cobrar el doble (20 pesos) por viaje. En el malecón, las familias que no pueden entrar a sus edificios por peligro de derrumbe se encuentran acampadas en la calle. En medio de la preocupación, se habla de un regreso a la fase más dura del Período Especial. En muchas tiendas en divisas no se encuentra ya detergente ni jabón de lavar, tampoco carne o pollo. Escasean productos como la leche en polvo, el aceite, el puré de tomate. No hay pan ni galletas de sal. Hay tiendas cerradas, como la de Línea y L, sin fecha de reapertura. Hay grandes colas y se comenta que si en dos o tres días las tiendas no son reabastecidas, quedarán vacías.

-La libra de pollo en Antilla está a 18 pesos. En Puerto Padre ha sido asaltado un almacén de tejas. En Isla de Pinos la población trata de saquear las tiendas en divisas, no hay autoridades y sí quejas de que el personal encargado de vigilar las tiendas está "resolviendo" sus propias necesidades (América TeVé).

13 de septiembre

-El precio de los aguacates sube de 9 a 20 pesos en varias provincias orientales. Las tejas de fibrocemento cuestan 9,50 cada una. En muchas zonas afectadas la gente se ha lanzado a comprar cualquier alimento por miedo al desabastecimiento en los próximos días.

-La Televisión Cubana está dando prioridad a las noticias sobre el décimo aniversario del encarcelamiento de los cinco espías y la situación en Bolivia, en detrimento de la información sobre la catástrofe humanitaria que vive el país. Incluso, las tareas de recuperación se "dedican" a los agentes de la Red Avispa.

-En Paso Real y Los Palacios, provincia de Pinar del Río, 13.000 viviendas han quedado total o parcialmente destruidas, el 79% del total. No hay electricidad y la red telefónica no funciona. En Paso Real la gente empieza a perder los nervios: llevan dos semanas sin luz y aún no han recibido la visita de ninguna autoridad. (EL PAIS)

12 de septiembre

-En el poblado de Puerto Padre, en Las Tunas, fuentes independientes han reportado el fallecimiento de una mujer que sufrió heridas tras el paso del huracán y murió después de ser hospitalizada.

-En Holguín: Desabastecimiento de las tiendas en divisas, de las que ha desaparecido el agua embotellada. El gobierno ha subido el precio de los huevos de 0,90 a 1,50 pesos. En el barrio de Zayas han fallecido al menos dos personas en el hospital tras resultar lesionadas; no aparecen en la lista oficial de muertos. Al parecer, este modus operandi se está repitiendo en otras zonas del país. Comisiones del gobierno están pasando por las casas pidiendo calma pues, según dicen, la crisis es para largo. La situación en Banes es de auténtica hambruna.

-Más de Holguín: el pueblo de Birán está incomunicado; se destruyeron dos puentes que comunican este poblado con Marcané. La fábrica de níquel de Nicaro prácticamente colapsó y se está trasladando mineral hacia la de Moa. En ningún hotel del polo turístico hay electricidad; se utilizan grupos electrógenos. La situación del agua también es crítica. Muchas presas han sufrido daños. Las áreas de playa están completamente devastadas, se han caído muchos árboles. Se dice que se perderá toda la cosecha de café porque no hay personal ni medios para paliar los daños. Se perdieron alrededor de medio millón de huevos de la reserva, así como unos 20.000 litros de leche.

-Los habitantes de un pueblo de Pinar del Río se liaron a machetazos para alcanzar las 100 tejas de asbesto cemento repartidas desde un camión. (Generación Y)

-En la Habana Vieja no funcionan los semáforos. Muchos árboles y postes eléctricos están caídos. Hay desolación en las calles. El Vedado tiene decenas de desconexiones eléctricas.

11 de septiembre

-En Holguín, decenas de miles de casas derrumbadas.

-El hospital de Nueva Gerona, en Isla de Pinos, quedó destruido, los aires acondicionados salían volando. Sólo el médico responsable de cuidar a los neonatos quedó en una sala con los pequeños, y tuvo que agarrar durante bastante tiempo el equipo de aire acondicionado.

10 de septiembre

-Camagüey ha quedado dividido a la mitad por un río desbordado.

-Una multitud le cayó encima a un grupo que viajó a Isla de Pinos con cajas de ropa.

-El saco de arroz en Pinar del Río e Isla de Pinos está a 100 CUC.

-La libra de malanga está a 15 pesos en Santiago de Cuba. Estaba a 5 antes del huracán. Los boteros han duplicado el precio del pasaje, de 10 a 20 pesos.

-En Baracoa se han dado casos de saqueo durante y después del huracán.


http://www.cubaencuentro.com/es/cuba/noticias/despues-del-ike-113204


He votado por la segunda opción ¡¡¡NO HAY MAL QUE DURE 100 AÑOS, NI CUERPO QUE LO RESISTA!!!

"Fue como si el fin del mundo
hubiese entrado a tu casa"

"VAMOS A PASAR HAMBRE
EN CUBA"
LOS DAMNIFICADOS SON
CINCO, SEIS MILLONES,
NADIE SABE


Los huracanes sucesivos han dejado
a decenas de miles de cubanos sin nada
- Las autoridades están desbordadas
y admiten abiertamente su impotencia

El Gobierno cubano ha reconocido su incapacidad para hacer frente a la devastación por su falta de recursos.
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EL SOL ACABA
EN LA HABANA
EL TRABAJO DESTRUCTIVO
QUE COMENZO
EL HURACAN "IKE"
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La Nueva Cuba
Septiembre 13, 2008
El 31 de agosto, el potente huracán Gustav golpeó con tal fuerza la pequeña localidad de Pinar del Río que rompió un anemómetro del Instituto de Meteorología tras registrar una racha de viento de 340 kilómetros por hora. "Fue como si el fin del mundo hubiese entrado a tu casa", intenta describir una vecina. La devastación es impresionante. En Paso Real y en el cercano pueblo de Los Palacios, la cabecera municipal, el Gustav destruyó total o parcialmente 13.000 hogares, el 79% del total. La red eléctrica fue aniquilada, al igual que el sistema telefónico, y todos los centros productivos de educación y de salud sufrieron daños severos. Cuando empezaban las labores de recuperación y el ejército traía las primeras ayudas y cubiertas, llegó Ike. Increíblemente, este ciclón repitió el 9 de septiembre la misma trayectoria de Gustav en Pinar del Río. El anemómetro de Paso Real, ya arreglado, registró ráfagas de 190 kilómetros por hora. "Casi nos volvemos locos. Esto ha sido lo más grande de la vida", dice Odalis Álvarez en su domicilio de Los Palacios, 90 kilómetros al oeste de La Habana. Pese a que ha perdido casi todas sus pertenencias, incluidas el refrigerador, los ventiladores y un viejo televisor soviético en blanco y negro, ha corrido con suerte: su casa se quedó sin techo pero resistió y su familia se ha salvado. El sistema de Defensa Civil cubano, que en este municipio evacuó a más de 18.000 personas -el 50% de su población-, advirtió de la fuerza de Gustav. Pero Odalis no pensó que la catástrofe sería tanta y permaneció en su vivienda. "Nos salvamos de milagro: por unos segundos pudimos refugiarnos con mi mamá y los niños en casa de unos vecinos". Dos días después del azote de Gustav las autoridades les dieron tejas de fibra de cemento para reparar el destrozo, pero cuando las estaban colocando llegó la alarma de Ike. "Nos dio tiempo a desmontarlas, pero miles de personas han perdido de nuevo sus techos". Sobre el futuro, es pesimista: "Con lo que gano no sé cómo voy a recuperar lo perdido, y en el país el desastre es tan grande que, aunque quiera, el Estado no puede". Y agrega: "Hace falta ayuda de afuera, de donde sea". En un hecho singular, ayer el diario Granma corroboraba lo que decía Odalis intuitivamente. "Imposible resolver la magnitud de la catástrofe con los recursos disponibles, pero nuestra gente es la primera prioridad", destacaba el periódico al entrevistar al general Carlos Lezcano, presidente del Instituto Nacional de Reservas Estatales. Lezcano aseguraba que todas las reservas existentes, incluidas las militares, se dedican a afrontar el desastre. El objetivo inmediato es atender a los damnificados. Pero es que los damnificados son cinco, seis millones, nadie sabe. Odalis recibió cubiertas para reparar el techo pero no su vecino, que por ironía del destino se llama Carlos Casanueva. "Con el primer huracán iban a darnos ayuda, pero ahora no sé qué pasará", dice, mientras remienda el techo de casa con tablas y chapas viejas. Las necesidades son tremendas. Localidades de oriente, como Gibara y Baracoa, a 1.000 kilómetros de Los Palacios, están destruidas. En Holguín, 90.000 casas se han derrumbado y se ha perdido el 90% de la cosecha de plátano. "Lo que viene es muy duro, vamos a pasar hambre", vaticina Luis García, un familiar de Casanueva que cree que ahora están "en veremos" los planes liberalizadores de Raúl Castro para reactivar la agricultura. "Aquí iban a repartir tierras a quienes quisieran cultivar arroz, pero imagino que ahora eso se irá a pique". En Paso Real muchos damnificados se sienten impotentes y pierden los nervios, como Delbis. "No tenemos nada, vamos para dos semanas sin luz y no ha venido nadie ni nos han dado nada". Su vecino, el barbero Misael Pérez, dice más: "Este pueblo siempre ha estado abandonado, y ahora los huracanes se han llevado lo poco que había". Son palabras duras. A la salida de Los Palacios se ven camiones militares llevando y trayendo tablas y tejas, y unas brigadas tratan de restablecer el suministro eléctrico. Todo está volcado hacia la recuperación, pero el golpe ha sido demasiado fuerte. En la radio dan la noticia de dos nuevos muertos, ya van siete.

Por Mauricio Vicent
Los Palacios
Pinar del Río

La Nueva Cuba
Septiembre 13, 2008

http://www.lanuevacuba.com/master.htm